Las organizaciones sindicales que representamos a los trabajadores vinculados a Avianca ilegalmente mediante Servicopava, rechazamos categóricamente una carta abierta redactada por la compañía con la que se recogieron firmas entre los trabajadores pretendiendo con ello quitarle legitimidad a la justa y valerosa huelga adelantada por los pilotos contra la política laboral de la aerolínea, caracterizada por conductas antisindicales, discriminatorias y que atentan contra los más elementales derechos consagrados en las leyes. Avianca es lo que es por el esfuerzo de sus trabajadores, desde las tripulaciones hasta los más humildes operarios que realizan la asistencia en tierra. Por ello rechazamos la mentirosa campaña que pretende mostrar que cualquier reivindicación que planteen los sindicatos va a acabar con la empresa.  

Lo ilegal no es la huelga de los pilotos sino la política laboral de Avianca que utiliza un pacto colectivo para crear diferencias que impiden el crecimiento de los sindicatos y la negociación de sus pliegos de peticiones. Lo ilegal es que Avianca mantenga durante años a miles de trabajadores bajo el régimen de las cooperativas como Servicopava cuyo fin es negarles los derechos propios del contrato de trabajo, en especial el de organización sindical, negociación colectiva y huelga y someterlos a toda suerte de arbitrariedades. Lo ilegal es que Avianca busque que le levanten las sanciones del Ministerio del Trabajo por incurrir en una intermediación prohibida por la Ley haciendo un despido masivo para reemplazar el personal que está obligada a contratar de manera directa y abriendo convocatorias que someten a un proceso de selección a gente que le ha servido a la aerolínea durante años.

Avianca niega cualquier vínculo con los trabajadores que realizan labores misionales para la empresa vinculados mediante Servicopava cuando se trata de reconocer algún derecho o para no responder por los atropellos de la supuesta cooperativa, pero sí los incluye como sus colaboradores cuando se trata de exigirles fidelidad a la compañía, rendimiento y cumplimiento de sus reglamentaciones. O como ahora que, utilizando el poder intimidatorio propio de las relaciones de subordinación, los conmina a firmar una carta de rechazo a una huelga legítima.

Los trabajadores que por debilidad accedieron a firmar la carta no saben el daño que se causan a sí mismos y a la lucha de los asalariados por mejorar las condiciones en las que venden su fuerza de labor. La huelga de los pilotos, como toda huelga, puede causar algún traumatismo en la operación aérea y afectar las utilidades del señor Efromovich, algo inherente al ejercicio de este derecho, conquistado precisamente para que la presión que provoca en los empresarios permita que los trabajadores obtengan mejorar los términos de su contrato, pero una eventual derrota de ACDAC significará el inicio de una negra noche para todos los empleados de Avianca en todas sus áreas y creará un precedente nefasto para la lucha de la clase obrera colombiana.

Asociación Nacional de Trabajadores del Sector Aéreo y de Servicios Aeroportuarios - ANTSA

Asociación Sindical de Trabajadores de Operaciones Terrestres del Sector Aéreo Colombiano - ASTOPTSAC