Lina Sánchez fue un pilar fundamental en la creación de la subdirectiva de ANTSA en Palmira. Para Avianca y Servicopava siempre fue una trabajadora ejemplar hasta ese momento, a partir del cual iniciaron una persecución contra ella en la que ya se suman seis procesos disciplinarios y sanciones por 33 días de suspensión. Se la ha acusado de mala actitud frente a sus superiores por decir con franqueza lo que piensa, o con argumentos rebuscados se le ha negado validez a los soportes que ha presentado por ausencias en situaciones de calamidad familiar. Lo último que hicieron fue tratar de acallarla montándole un proceso acusándola de referirse “en forma inadecuada a la cooperativa y a la empresa cliente” en las redes sociales, por sus publicaciones en Facebook sobre las actividades de ANTSA, en particular sobre el mitin que realizamos conjuntamente con ASTOPTSAC ante el Ministerio de Trabajo el pasado 24 de abril, para exigir que se atiendan la propuesta de formalización planteada por los sindicatos, así como sus denuncias.
En la persona de Lina Avianca y Servicopava están violentando los derechos fundamentales a la libre expresión y a la asociación sindical. Ya en los procesos anteriores lo habían hecho con el debido proceso, un derecho que no le respetan a ningún trabajador. Al pretender acallar su voz lo que buscan es silenciar a los sindicatos. Si los sindicatos permitimos que prosperen este tipo de medidas represivas estaríamos renunciando a nuestra razón de ser. Sin el derecho a expresarnos no podremos luchar por el resto de nuestros derechos.
Con la ayuda del sindicato Lina ya interpuso una acción de tutela contra Avianca y Servicopava en la que reclama protección a sus derechos a la libre expresión, a la libre asociación y al debido proceso. Allí se pide al Juez que ordene como medida cautelar la suspensión del proceso disciplinario.
Los trabajadores conscientes que han sido testigos de la valentía y la entereza de Lina en la defensa de los intereses que nos hemos propuesto, le han expresado en esta hora su afecto, su solidaridad y su respaldo incondicional, no sólo por lo que ella representa, sino por lo que está en juego para la actividad sindical en la persecución a su persona.